
"Tú no me conoces todavía bien, mi amor. Tú ignoras la profundidad de mi vínculo contigo. Dame tiempo, dámelo, para hacerte un poco feliz. Tenme paciencia, espera a ver y a oír lo que tú eres para mí", le escribió en abril de 1949 la Premio Nobel a Dana, que era 30 años más joven."Yo me pongo en el viento y en la lluvia tierna, para que estos, viento y lluvia, puedan abrazarte y besarte para mí", le escribe Dana por esa misma fecha. Las cartas estaban guardadas en las 168 cajas con poemas inéditos, manuscritos, fotos y otros documentos que fueron donados al Estado chileno por Doris Atkinson, sobrina de Dana, cuando ésta murió en 2006. (Leer el artículo completo vía Revista Ñ)
No hay comentarios:
Publicar un comentario